Las preguntas que se le vienen a uno a la mente cuando quiere comprarse un sillón de piel es si será de piel auténtica y cual será su calidad. Cuestión difícil si no eres un entendido en pieles. Hoy las imitaciones son tan buenas que es difícil diferenciarlos a simple vista.Por lo que no te queda otra que fiarte del comerciante y exigirle la garantía de que es piel auténtica.
Hay un truco que a mi me ha funcionado hasta ahora, y es el olor. La piel tiene un olor peculiar, puedes notarlo nada más entrar en el comercio. Pero si no fuera así, por diversas razones, frota una parte del sillón con los dedos y acerca la nariz, notaras que desprende este olor del que te hablo.
Otro truco es acariciar las diferentes partes, puede que alguna sea de piel y otras de polipiel, es decir piel sintética. Si por el tacto te parece que no es piel o tienes dudas, frótalo, como te he dicho antes.
La piel auténtica tiene una textura característica en el revés. Las imitaciones suelen tener este cubierto con una malla o con un tacto parecido al ciertopelo que se desprende cuando lo arañas, lo que no sucede con la piel. Suele ser difícil acceder al revés en alguna parte del sillón pero si puedes míralo.
Las calidades son muchas, recuerda que la piel es un producto natural, por lo que es normal que existan distintos matices y que los colores puedan variar ligeramente de un producto a otro. Las marcas de cicatrices o de picaduras de insectos son una característica natural de la piel con grano natural.
Ya solo queda que te decidas por un modelo que te guste y se adapte a tus necesidades.
Cuando tengas el sillón en casa, sigue las instrucciones del fabricante en cuanto a limpieza e hidratación. Ten en cuenta que la piel es sensible a la luz del sol, a las manchas y al sudor, a si que procura protegerlo de la luz directa del sol y mantenerlo apartado de las fuentes de calor.
Con el tiempo puede producirse un cambio de color como consecuencia del uso y de la luz.
Bueno, pues que lo disfrutes.
Para opendeco.es, Muri. Un beso.
Fuente de la noticia: Cómo elegir el sofá de piel