Las flores siempre han sido parte de la belleza femenina, como adornos, como cosméticos, en los perfumes… cada vez son más las propiedades que se descubren en ellas.
Las variedades más empleadas son:
El aciano. Esta planta es ideal para la conjuntivitis, en medicina es muy utilizada, pues en la cabeza de sus flores hay sustancias anti bacterias y antiinflamatorias.
El narciso contiene en el bulbo una sustancia llamada IBR-Dormin, el cual, ayuda a regenerar y renovar las células con mayor frecuencia, por este motivo, cuando la piel está reseca porque las células tardan en regenerarse, su aplicación es casi indispensable.
La manzanilla es ideal para la piel sensible y la prevención de los enrojecimientos. Tiene propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. También es muy aconsejable para los signos anti-edad (sequedad, descamación) y la prevención de la exposición al sol.
La rosa es muy famosa por su aceite de rosa mosqueta. Este aceite se aplica para conseguir frescura, suavidad y tersura en las pieles más maduras. Este aceite es una fuente natural de ácidos linoleico y linoténico, además de vitamina C. Disminuye los radicales libres y elimina la pigmentación.
La onagra es elevada en ácidos grasos esenciales, por lo tanto, es indicada para hidratar la piel. Afecciones como la soriasis o eczemas son tratadas con esta planta. Es un gran alivio para el escozor, la descamación o la resequedad.
En todos estos productos, hay laboratorios muy recomendados que trabajan con estas plantas como pueden ser: Vichy, Elizabeth Arden, DDF, Kielh´s.
Fuente: tu estética