
Ya llegó la Navidad. No paramos de tener compromisos, comidas, cenas… Excesos y más excesos que aún más allá de notarse en la báscula o costarnos una multa por conducir con más nivel de alcohol en sangre del permitido, pueden llegar a ser mucho más perjudiciales. Me refiero a las intoxicaciones alimentarias. Esta semana fui a cenar en Madrid, en la calle Goya, a un conocido Oyster Bar con unas amigas… Todo muy rico, pero cuál no sería mi sorpresa cuando día y medio después, no había manera de frenar los vómitos y las nauseas y el dolor de tripa se volvió insufribles… Sin lugar a dudas, las ostras me la jugaron, creo que no fui la única…
Y es que la mayoría de las intoxicaciones alimentarias que se producen en nuestro país tienen lugar en Navidad, principalmente debido al consumo de mariscos crudos o en mal estado, pero no son los únicos desencadenantes. Para que puedas prevenirlo y no te pase lo mismo que a mí te dejo aquí algunos consejos a seguir:
1) No comer mariscos crudos. Evitarlos a toda costa. El riesgo de intoxicación está ahí, tú sabrás si te la juegas, yo me la jugué y perdí. Sólo hazlo en un sitio de muchísima confianza o si sabes que son de primerísima calidad. Y antes de irte a acostar bébete un buen vaso de leche… Dicen que es magia contra el veneno y no pierdes nada por prevenir.
2) Si vas a tomar marisco, que sea cocinado y nunca lo dejes enfriar a temperatura ambiente, enfríalo directamente en el frigorífico después de haberlo concinado.
3) Si tomas carne picada, cocínala a fuego lento.
4) Para las salsas con huevo, asegúrate de que los huevos sean frescos, si la cáscara tiene rajas, deséchalos; no los laves, ya que la humedad favorece las bacterias. Una vez preparada la salsa, puedes mantenerla en el frigorífico, pero no más de 24 horas.
Siguiendo estos consejos evitarás las intoxicaciones alimentarias más comunes que vienen acompañadas de síntomas bien desagradables y, en determinados casos, pueden costarte hasta la vida. ¡No seas inconsciente y cuídate estas fechas!
Fuente: Madrid Salud