El diccionario de la Real Academia Española define a la suegra como la “madre del marido respecto de la mujer, o de la mujer respecto del marido”.
Para unos, son un mal necesario y para otros, una bendición. Para algunos es la representación del diablo y para otros, la segunda madre.
¿Pero qué pasa cuando esa persona que al principio te ha resultado amable y simpática empieza a mostrarnos una cara oculta que solo nosotras, como nueras, somos capaces de ver?.
Entonces es cuando te surgen las preguntas.
Las suegras ¿son malas por naturaleza?. La suegra ¿nace o se hace?. Pero es que ¿son todas iguales?. Algunas preguntas que aparentemente no tienen respuesta.
A lo largo de la historia han construido una fama de la cual les es difícil escapar, pese a que, según algunas aseguran, la modernidad habría contribuido a cambiar su imagen (claro, ellas qué van a decir…).
Quienes creen que ellas son como otra madre les permiten que actúen de mediadoras en los conflictos de la pareja y en muchos casos les confían la responsabilidad de criar a sus hijos y entonces la llaman abuela.
Los que no las quieren, dicen que se entrometen en la vida de la pareja, las llaman brujas y las acusan de manipuladoras.
Uno de los chistes más difundidos señala que el diablo creó a las suegras porque no podía estar en todas partes.
Fuente: suegramanía
Fuente de la noticia: La suegra