No hay duda de que el rojo es un color muy animado, que transmite pasión, calidez… ¿Estás pensando en convertirlo en el color protagonista de tu casa? Si te gusta, es una buena idea, aunque también hay que tener en cuenta un consejo: si te pasas, puede ser agobiante.
Y es que el rojo tiende a hacer más pequeño el ambiente, por lo que no es muy recomendable, por ejemplo, pintar todas las paredes en rojo. Pero puede ser una idea estupenda pintar una sola pared en este tono, y el resto de otro (blanco, por ejemplo)
Además, después puedes combinar algunos detalles de la decoración en este color, pero sin pasarte, ya que un exceso puede provocar el efecto contrario al que buscamos y no quedar bien. Por ejemplo, los cojines del sofá, algún mueble pequeño (como un porta Cds, una estantería) pueden ser suficientes.
En cuanto a los colores con los que puedes combinarlo, depende de tus gustos, pero una idea que suele quedar muy bien y dar bastante buen resultado es hacerlo con negro y blanco.
Foto de Apartment Therapy
Fuente de la noticia: Llena tu casa de rojo