Quizás nunca se habían detenido a pensar, que los días Domingo eran los días más económicos para celebrar una boda.
En casi todas partes, los días Domingo son el día más barato para celebrar un matrimonio. En vísperas de un fin de semana, siempre les será más complicado encontrar algo que se ajuste a un presupuesto apretado, en cambio, día Domingo, ya es muy baja la demanda por organizar fiestas, así que los precios caen abruptamente en todo orden de cosas.
Los organizadores de eventos, podrían entregarles tarifas espectaculares, incluyendo cantantes y artistas, y hasta el hotel para la noche que sigue, si eligen el último día del fin de semana.
Yo creo que la mejor hora para pensar en celebrar la boda, es el Domingo por la tarde, ya que día Lunes, muchos tienen que volver a sus trabajos, y por lo mismo, se les hace muy complicado asistir a una fiesta en una jornada nocturna. Un cóctel sencillo y una cena apenas comience a oscurecer, creo que es suficiente para celebrar una boda sobria y elegante.
A mí nunca me ha gustado la idea de que haya que tirar la casa por la ventana en cada boda que se celebre. Creo que la boda no debería ser para fiestas tan largas, porque a fin de cuentas, ¿quién se lo pasa más incómoda con ese vestido largo y los tacones?, la novia, ¿Quién es la que está todo el rato sometida a las cámaras y la mirada de toda la gente, la novia…y eso, para los novios, no es nada divertido. Al final, todos se desordenan, menos los que organizan la fiesta.
Vía: Glamour, Foto: (Jensm) flickr
Fuente de la noticia: Por qué conviene casarse un Domingo
