Cuando un bebé se encuentra en el útero de la madre, se alimenta a través del cordón umbilical, todas las sustancias que la madre ingiera van directamente enfocadas a nutrirlo a él también, por ello, una madre en período de gestación, debe cuidar su alimentación, esta ha de ser sana y equilibrada.
Todo alimento que la madre toma, es filtrado y purificado antes de llegar al bebé, por ello, no se puede saber a ciencia cierta, la cantidad de un alimento nocivo como es el alcohol, podría llegar hasta él. Lo más recomendable es, no ingerir ni una sola gota mientras se está embarazada e incluso en el período de lactancia. El alcohol que pudiera llegar hasta el bebé, sería totalmente perjudicial, pues sus órganos todavía se encuentran en desarrollo y no están preparados para asimilar esta sustancia.
Si esto llegara a ocurrir, las consecuencias a las que darían lugar, podrían ser:
-abortos repentinos
-bajo peso
-problemas en el sistema nervioso (retrasos mentales, falta de coordinación, niños hiperactivos…)
-problemas en el desarrollo (comportamientos extraños, aprendizaje, falta de concentración…)
-malformaciones en los órganos
Por todo ello, hay que estar segura ante de la duda de beber o no alcohol, de que no se está embarazada. Si esto llega a ocurrir y se ingiere alcohol durante el embarazo, hemos de acudir al médico para escuchar sus recomendaciones y perjudicar al bebé en la menor medida posible. Los especialistas, en estos casos, suelen hacer un estudio sobre la cantidad de alcohol que se ha podido ingerir. De todas formas un buen consejo es brindar con una copa de jugo natural.
Fuente: baby sitio