Seguro que has oído hablar de lo perjudiciales que pueden llegar a ser los tampones, del Síndrome del Shock Tóxico, el agravamiento de los dolores menstruales… etc. Tienes la opción de usar compresas higiénicas, pero reconozcámoslo, son un engorro, están todo el rato en contacto con la piel, se mueven y son incómodas. Parece que no hay manera de hacer un poco más soportables esos días pero os voy a presentar una opción novedosa que en realidad se lleva usando desde la Antigüedad, se trata de la copa de luna o mooncup.
En mi caso, fue mi hermana quién me habló de este sistema, ya que la usaban muchas de sus amigas y estaban encantadas. ¿De qué se trata? Pues bien, es una especie de cono de plástico flexible, que se introduce en la vagina y recoge el flujo de regla. Una vez el cono se llena, hay que vaciarlo, limpiarlo con agua y volverlo a colocar. Al final de cada menstruación se mete en un recipiente con agua hirviendo ¡y ya está listo para utilizarse el siguiente mes!
Como veis es súper práctico y al parecer es comodísimo, ¡ni te enteras de que lo llevas puesto!
Sus ventajas son innumerables, desde la cantidad de dinero que te vas a ahorrar en tampones, compresas y demás hasta lo beneficioso que resulta para el medioambiente al no generar residuos por esta causa varios días al mes. Visto así, dan ganas de hacerse con uno, ¿a que sí? Pues bien, lo puedes comprar por Internet. Hay varias páginas que lo venden, así que con una rápida búsqueda en Google puedes comparar modelos y precios. La marca más conocida es Copa de Luna. Lo tienes en diferentes colores y tamaños. Normalmente, si eres mayor de 30 años, ya has tenido hijos o tus reglas son muy abundantes necesitarás una talla grande. Si eres menor de 30, aún no has sido madre o tienes flujos ligeros, una talla pequeña sería tu opción.
¿Te animas a probarla?
Fuente: Copa de Luna