Ya se acerca la noche de más “canguis” de todo el año y va siendo hora que empecemos a pensar en decorar nuestro hogar de una manera espeluznante y terrorífica para que nuestros invitados entre bocado y bocado se les pongan los pelos de punta y no les haga provecho la cena, si, por que para cenar cualquier día es bueno pero para reírnos y asustar a los comensales esta es la noche ideal.
Una buena idea para empezar es dale un toque a la casa de abandonada y tenebrosa, lo conseguiremos colocando sabanas por encima de los muebles y sofás.
Consigamos unas calabazas de fieltro o plástico ubiquémoslas en puntos estratégicos de la casa mejor con una vela dentro para que el juego de sombras y luces de un toque misterioso a la casa.
Muchas velas y poca luz artificial. Hay muchos modelos de velas con temas de terror velas con forma de calavera o color negro violeta o blanco serán los colores más indicados.
Si te utilizas bombillas convencionales hazte con algunas de colores los más recomendable son las bombillas de color rojo o violeta, o también cubre las lámparas con pañuelos de colores tenebrosos para que tamicen la luz, ten siempre cuidado con que no rocen la bombilla no vayamos a salir todos disfrazados de bomberos.
Muchas telarañas por todos los rincones y ventanas de la casa, los podemos fabricar nosotros mismos con hilo grueso anudado o la lana también causa este efecto de telaraña. Combínalas con gasa fina para aumentar el efecto visual.
Coloca flores negras marchitas en las estanterías y en las mesas de la casa añade vampiros y murciélagos de plástico que podrás encontrar en las tiendas de disfraces y pon arañas de plástico en vasos platos para asustar a los invitados.
Haz de tu casa por una vez un sitio donde los invitados no se sientan especialmente cómodos y que no sepan por donde les puede salir una sorpresa terrorífica en cualquier momento.