La adicción es una atadura que se crea emocionalmente, y que hace perder el control sobre el que lo padece. La mayoría de las adicciones perjudican a la salud física, por lo que se debe tratar inmediatamente en el ámbito psicológico para tratar de combatirlo y quitarnos esta atadura.
La adicción no lleva al concepto de cosas físicas que consumimos, como el alcohol, las drogas, ni a los mas dispares, como el juego, el sexo, comprar, robar, chocolate, fumar, etc. La adición de divide en dos términos, la adicción en dependencia de una sustancia, y la adicción a un comportamiento. Anteriormente, la adicción se basaba en drogas, alcohol y tabaco y todas las sustancias psicoactivas.
Al cabo de muchos estudios, se ha determinado por innumerables psicólogos, que la dependencia psicológica debe ser tratada como adicción, puesto que lleva a determinados comportamientos como culpa, vergüenza, fracaso, ansiedad, fracaso, rechazo, exclusión, etc.
Una persona comienza con la adicción, probando algo que le guste y le estimule, y quiera volverá probarlo. Llega un momento en que esa decisión voluntaria, se vuelve necesaria, por lo que la hace dependiente y no pueda controla la situación. Es por eso, que un hábito puede convertirse en una adicción.
La solución ideal ante la imposibilidad de que por ti misma puedas tomar las riendas, es acudir a la ayuda de un psicólogo, para que te ponga las riendas en la mano y llevar el control de tu vida.
Fuente: psicologia.mujer
