No estoy muy por la labor de casarme, pero como a todas las mujeres, me encanta ver catálogos de vestidos de novia, pararme en los escaparates de las tiendas de Pronovias (generalmente para criticar lo poco que me gustan los diseños)… por si acaso en un futuro cambio el chip y decido casarme y ser feliz y comer perdices para siempre.
Tengo muy claro que si alguna vez decido ir vestida de novia hasta el altar o hasta el juzgado, para gustos colores, me gustaría que mi vestido fuese de la diseñadora Rosa Clará, me encanta la sencillez de sus diseños, y me encanta todavía más que tenga una línea de vestidos de novia de bajo coste (entre 1000 y 2000 euros) a la que ha llamado Aire.
La reducción de precios respecto a los diseños de la colección de Rosa Clará radica en que la fabricación de los modelos de Aire tiene lugar en Asia, además, claro está, que no llevan los mismos detalles ni el mismo trabajo que un vestido de novia de la firma de la diseñadora Rosa Clará, pero el estilo es inconfundiblemente el mismo.
Si tienes tu boda en unos meses te recomiendo que le eches un vistazo a los 300 modelos de Aire, hay muy muy bonitos y que nada tienen que envidiarle a modelos de más de 3000 euros, seguro que encuentras el tuyo (también hay una colección para las damas de honor y madrinas) y te ahorras un buen dinerito para el viaje de luna de miel que seguro que disfrutas más que un vestido que solo vas a ponerte un día.