El verano es una época de cambios, ya no sólo referente a la ropa que utilizamos o al paisaje que nos rodea, sino que también cambia nuestro hábito de comidas. En esta época es necesario seguir una serie de pautas para no salir de nuestra rutina habitual y poder mantener una vida sana y saludable.
Expertos en el mundo de la nutrición coinciden que durante esta época es necesario apostar por los alimentos que nos ayuden a mantenernos hidratados, evitar los temidos golpes de calor o mantener nuestra piel sana. Son consejos que cualquiera puede aprender por medio del curso nutricionista a distancia que oferta CEAC.
Como hemos comentado anteriormente, la hidratación es uno de los factores que más debemos cuidar en esta época. El calor hace que nuestro organismo pierda líquidos de forma más rápida. Para evitar esta situación, nada mejor que apostar por alimentos ricos en agua. Uno de mis favoritos es sin duda la sandia. Se trata de una fruta que apenas aporta calorías al cuerpo ya que casi al 100% está formada por agua. Además también nos aportará una sensación de frescor para aquellos días en el que el calor apriete.
Los zumos también son una buena solución para mantenernos hidratados, sobre todo si se trata de zumos naturales. En este caso, cualquier fruta es buena, pero si además quieres cuidar de tu piel, un zumo de pepino o de zanahoria te aportará los nutrientes necesarios para disfrutar de una piel sana.
El calor del verano hace que nuestro cuerpo nos pida algo fresco. Muchos optamos por el consumo de helados, pero este tipo de productos aportan a nuestro organismo sustancias que luego son difíciles de eliminar como grasas y azúcares. En su puesto podemos apostar por las gelatinas, un producto que en su gran parte está formado por agua pero que gracias a su ligero sabor dulce, hará que nos olvidemos de los helados.
Los expertos también recomiendan consumir los conocidos como «alimentos esponja«, es decir, aquellos alimentos que tienen la capacidad de absorber gran cantidad de agua mientras son preparados, como son los fideos, las lentejas o e cuscús.
Pero además de una dieta saludable, si queremos estar en forma durante el periodo veraniego, no nos debemos olvidar de realizar alguna actividad física como correr, andar o montar en bici.
