El deterioro de los servicios públicos como solución para sobrevivir a la crisis, más aún en el ámbito de la Sanidad Pública, multiplica los problemas de salud de los españoles así como las quejas de los profesionales del sector. Madrid, Cataluña, Asturias y otras comunidades autónomas sin distinción, se están viendo afectadas por los recortes en salud mientras que se multiplican las protestas al respecto.
Precisamente hoy, Alfonso Alonso, ministro de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, presidirá el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (SNS) donde, junto con los consejeros de Sanidad autonómicos, tratarán el «Informe Doulas», el Plan de la Hepatitis C, los precios de referencia de medicamentos, la venta de medicamentos a través de Internet, la Estrategia de Cronicidad en el SNS y la asistencia del cáncer en la infancia y adolescencia, entre otros temas de salud a nivel nacional.
Pero, al margen de estas reuniones y esfuerzos por parte de la administración pública, que más parecen enfocados a acallar protestas concretas que a solucionar problemas del día a día con los servicios de salud, la situación de atención al paciente continúa siendo mínima por la falta de personal en atención primaria y urgencias. Son muchos los que han alzado su voz para quejarse de esta situación como por ejemplo Marciano Sánchez Bayle, Portavoz de la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública, quien aboga por Recuperar la Sanidad Pública y Soledad Becerril, Defensora del Pueblo de España, que critica abiertamente el deterioro de la salud pública en España.
Es más, si a los recortes presupuestarios en sanidad le sumamos la privatización y el reciente pacto político por el que se vuelve a dar servicios sanitarios a todas las personas residentes en España, incluso aunque se encuentren en situación irregular, nos encontramos con que mes a mes los sistemas de salud pública continuarán colapsándose. En estos momentos ya no nos puede extrañar ni que nuestro país registre más de 5.700 casos de tuberculosis al año, dato que nos sitúa muy por encima de la media europea aunque se espera reducir gracias a la reapertura de la sanidad pública a inmigrantes que son la principal fuente de contagio de esta dura enfermedad más propia del tercer mundo.
Al margen de la situación actual nos gustaría finalizar este artículo con la parte más positiva en el sector de la salud tanto pública como privada y es la cantidad de información que podemos encontrar por internet sobre centros de salud, tratamientos y los médicos con mejores recomendaciones, así como la facilidad de pedir cita al médico por internet a través de páginas como Doctuo.es donde te explican paso a paso cómo hacerlo y así al menos evitar las esperas al teléfono o tener que hablar con una maquina. En comunidades autónomas como Cataluña la mayoría de los centros de salud pública ya aceptan este sistema de cita previa online.
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