Muchas veces pensamos que con determinadas costumbres y hábitos podemos perder peso y quitarnos unos kilitos de más. Pero lo cierto es que hay algunos errores muy habituales que no deberíamos cometer. Toma buena nota, porque seguro que lo notas en tu silueta.
- Comes lo mismo una y otra vez: aunque tu dieta sea baja en calorías, si siempre comes lo mismo acabarás por llevar una alimentación muy baja en nutrientes, algo poco beneficioso. Lo mejor es que incluyas guarnición de verdura y que cambies de carne: pollo, pavo, que comas pescado…
- Ayunar: dejar de comer durante un día entero, por ejemplo, para quitarte un milito antes de ir a esa fiesta que tanto esperas no es, ni de lejos, un hábito sano. Con 5 horas de ayuno, tu metabolismo se ralentiza, lo que hace que ganes a la velocidad del rayo el peso que has perdido con ese ayuno. Es mucho mejor que comas cinco veces al día cosas muy ligeras, evitando así problemas de estómago y sin ataques de hambre.
- Saltarte el desayuno: es la comida más importante del día, por lo que es un error muy grave que no desayunes. Además, no desayunar tampoco evita que engordes, así que deja de hacerlo… Un yogur y una pieza de fruta, por ejemplo, además de un zumo, un café o algo de pan integral con pavo puede ser un desayuno sano y muy equilibrado.
- Una ensalada: es cierto, cuando salimos a cenar o a comer fuera de casa, muchas veces pedimos una ensalada… y nada más. El problema es que acabamos picando de los platos de los demás, con lo que el esfuerzo no sirve de nada. Es mucho mejor cenar algo ligero, como pescado o pollo a la plancha.
Foto de Buena Forma
