Aunque parezca todavía increíble, una de las noticias que aún son muy sonoras en todo el mundo mundial es la muerte del terrorista más buscado del mundo, Osama Bin Laden. Buscado desde hace 10 años, declarado enemigo número 1 de los Estados Unidos y todo el mundo en general, ha sido encontrado muerto por las tropas estadounidenses porque estos lo han fulminado de un disparo en la cabeza.
Este hombre acabó con la muerte de alrededor de unos 3.000 personas en el mayor atentado contra la especie humana que hasta la fecha conocemos y la multitud de heridos que dejó, además de los familiares y amigos e imágenes que nunca se podrán olvidar de nuestras imágenes como son las dos Torres Gemelas cayendo a metros de altura con vidas humanas dentro.
El hecho de que este terrorista haya perdido la vida, haya muerto, que su muerte haya sido cruel… no puedo dejar de pensar que puede ser un error, que puede ser un factor negativo hacia nosotros, que sus aliados pueden revelarse hacia nosotros y tomar represalias aún más y quién sabe si hacernos algo. Me alegra, aunque está mal alegrarse por la muerte de alguien, que este hombre este muerto y que así pague por todo lo que ha hecho, de esta forma no podrá chantajearnos por nada ni por nadie, no tiene vida no es nadie, no vale nada. Pero, estemos en alerta, con los dos ojos abiertos y muy atentos.