Hasta ahora siempre hemos hablados de las bodas temáticas en su totalidad, pero existen también opciones diferentes para salir de lo clásico sin tener que ambientar demasiado para ello.
Un ejemplo de esto son las tartas temáticas. Las mismas ofrecen la posibilidad de ornamentar el pastel de bodas, de acuerdo a un tema en específico.
Por ejemplo, ahora que estamos en plena primavera, las flores con su fragancia y su colorido, son una fuente de creatividad lo suficientemente rica como para desplegar el ingenio, ya sea de reposteros como de decoradores.
Otra posibilidad se centra en plasmar el rostro de los novios en la cima o sobre algún lateral del pastel. Las novedosas tecnologías que nos invaden a diario, han llegado oportunamente al mundo de la repostería, ofreciendo la posibilidad de a partir de una foto de los contrayentes, dejar su imagen sobre la superficie de la torta, con ingredientes totalmente comestibles.
En el caso de los más glamorosos, las tartas pueden estar cubiertas parcial o totalmente con animal print a elección, o una simulación de encajes de épocas medievales.
Los novios también tienen oportunidad de opinar, pues la tarta se suele realizar en ocasiones, con los colores o el escudo de su equipo de fútbol preferido.
Así podríamos estar horas enumerando posibilidades de personalización de pasteles. Lo interesante aquí, es destacar parea aquellas parejas prontas a contraer matrimonio, y que no deseen una fiesta temática, o simplemente, ya no lleguen con el tiempo a programarla, que simples toques pueden dar un giro importante al agasajo de bodas.
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