Una novia árabe

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Una linda opción para diferenciar a tu boda de otras conocidas, es la que se desarrolla en torno a un ambiente árabe, en el cual tanto novio como novia, pueden convertirse en jeque y odalisca en un abrir y cerrar de ojos.

La fiesta debe estar ambientada al mejor estilo desierto, donde los colores arena y amarillo fuerte deben prevalecer por encima de todos los demás.

Para dar la bienvenida a los invitados, se sugiere preparar un ingreso simulando una carpa o tienda de campaña, como se estila en las zonas desérticas. Desde ya que la llegada hasta la misma debe estar acondicionada con arena o algo similar, como por ejemplo, una alfombra al tono o mosaicos de piso color beige.

No habrá que preocuparse por la vegetación, ya que en el desierto no existen plantas, más la isla preparada para la cena y posterior baile, puede ser ambientada al estilo oasis perdido en medio de la nada.

La novia puede llevar su traje habitual y luego cambiarse, o directamente llegar a la fiesta caracterizada como odalisca, mientras que el novio será el jeque.

En ningún harem puede faltar la danza sensual de las demás odaliscas, que invitará progresivamente a cada uno de los invitados a seguir la danza propuesta, por medio de una coreografía fácil de conocer.

El blanco tendrá un papel importante en manteles y cobertores de sillas, así como el los adornos que se coloquen en el salón donde se desarrolle la fiesta.

 

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