Autor: Lau
Se me ocurren cientos de consejos para ayudar a gente que quiera abrir un negocio pero, por razones obvias de espacio, he de elegir uno. Sin duda éste es el más útil.
Hay un anuncio para emprendedores patético en televisión, que me va a venir fenomenal para lo que quiero explicar. El anuncio dice:
«Cosas que necesitas para abrir un negocio: un letrero de abierto y de cerrado, ganas, una idea, más ganas, un cierre,…..» ¿Recordáis? Mi socia y yo cada vez que lo vemos nos miramos atónitas. Hay un pequeño detalle que han olvidado en una lista que peca tanto de divertida como de irreal.
Apuntad: CLIENTES.
Los clientes son la base para que un negocio tenga futuro, para que exista. Sin clientes no hay negocio, vaya. Cuando tomas la decisión de crear uno compruebas que existen muchas publicaciones, lugares a los que acudir a pedir información, webs, instituciones, asesorías, planes de empresa, etc… Millones de opciones complejas y tú, en medio, sumergida en un mar de dudas a puntito del naufragio.
La cosa es mucho más sencilla. Centraros en la palabra mágica: CLIENTES. Todo lo que derive de ello será positivo: ¿Qué necesitan mis clientes?, ¿Dónde están mis clientes?, ¿Cuándo y cómo cobro a mis clientes?, ¿Cómo son mis clientes?, etc.
También detallo mi lista personal de necesidades para el éxito, por orden de prioridad: adaptabilidad, dedicación, organización, trabajo en equipo, formación, pasión y paciencia. Y como adaptabilidad es la primera, quizá mi lista mañana cambie…
Creo que lo apasionante del mundo del emprendedor es que no hay reglas ni caminos exactos (exceptuando el burocrático y contable). Todo tiene un componente creativo que lo hace muy apetecible día a día.
Ah! lo olvidaba, si sois mujeres emprendedoras, preparaos para que la mayoría de proveedores, clientes y demás os tomen menos en serio.
Buenas suerte.