SOLO VEGETALES
La utilización de CM de origen humano en cosméticos está prohibida en la Unión Europea, y la incorporación de fluidos de CM de origen animal se encuentra en proceso de aprobación. Por tanto, el término «cosméticos con células madre» puede llevar a confusión, ya que ni las CM ni sus extractos se incorporan a estos productos. Tampoco se modifica el código genético ni se utilizan CM de embriones.
Lo que sí está permitido, en cambio, es la incorporación de componentes identificadas de fluidos de células madre cultivadas, citokinas, péptidos, etc., Así como la de activos seleccionados de células madre de origen vegetal. Estas reactivan y aceleran por mecanismos de mimetismo la regeneración celular propia de nuestra piel.
ALOPECIA Y ACNÉ
Las virtudes de las CM vegetales van más allá de la zona facial. No sólo están contribuyendo a reparar y regenerar los tejidos, sino también a intensificar el crecimiento del cabello. Ayudan a combatir la alopecia, protegiendo los folículos pilosos y complementando su capacidad de renovación en el caso de la dermatitis atópica.
También los adolescentes castigados por el acné pueden encontrar una solución al problema con un tratamiento que contenga células madre vegetales, ya que han demostrado la eficacia a la hora de regular la secreción de grasa. Por otra parte, en el campo de la medicina estética o cirugía plástica también se utilizan con éxito para acelerar la recuperación postquirúrgica o tratamientos abrasivos.
Fuente: el cuerpo
