Seguiremos hablando de la retención de líquidos, un problema tan frecuente en las mujeres que nos hace sentir incómodas e hinchadas. Te aconsejamos leer el artículo anterior sobre este tema en el que hablamos de sus causas y algunas formas de evitarlo.
Para contrarrestar el nivel de sodio del organismo y llegar a mantener el equilibrio de líquidos podrás consumir frutas como el melón, el plátano y la sandia. Ademas de verduras como la calabaza, acelga, berros y alcachofa.
Es muy importante que te acostumbres a beber al menos dos litros de agua al día. De esta manera el organismo estará hidratado y dejará que los líquidos retenidos se eliminen con facilidad. Si bien es muy importante mantenerte hidratada no deberás superar los cuatro litros diarios para que no comiences a retener líquidos por sobrecarga. Si vas a beber agua mineral no deberá ser rica en sodio.
Lleva adelante una buena rutina de ejercicios para evitar la retención de líquidos. Una buena opción es caminar al menos 30 minutos todos los días, una excelente forma de mantenerte en forma y permitir que el organismo funcione correctamente. Recuerda beber agua antes de empezar cualquier rutina de ejercicios.
No uses prendas que sean demasiado ajustadas. Evitarás que se obstruya la circulación y evitarás que se dificulte la correcta expulsión de líquidos.
Trata de seguir un tipo de vida sano, con hábitos beneficiosos para tu cuerpo y tu espíritu.
Retención de líquidos durante el embarazo
Durante el embarazo el 50 por ciento de las mujeres retienen líquidos, especialmente durante el tercer trimestre. Esto se debe a los cambios hormonales que se generan en el embarazo. Un claro síntoma es la hinchazón de los pies y los tobillos.
Si bien no es nada preocupante tendrás que comentarlo con tu médico. En el caso de que la hinchazón sea excesiva y se amplia en la zona de la cara y de las manos deberás acudir a tu ginecólogo.
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