Dale el toque que le falta a tus comidas con este rico sofrito, sencillo, rápido, económico y muy saludable. Para hacerlo sólo necesitas unos tomates, cebollas, un chorrito de aceite de oliva, sal, comino y colorante, aunque puedes condimentarlo con las especia que prefieras, como pimienta o curry, de todas formas queda buenísimo.
Las proporciones elígelas tu misma, si te gusta más la cebolla utiliza más cebollas, sino, más tomates, no hace falta que les quites la piel pero si no te gusta pélalos.
Lávalos y trocéalos en daditos, calienta la sartén con un poco de aceite de oliva y añade la cebolla, remuévela de vez en cuando y cuando esté mas o menos doradita añade los tomates y una pizca de sal, deja que tome color y una vez más remueve de vez en cuando.
Cuando veas que el caldo ya se está evaporando espolvorea comino y un poco de colorante, remueve y retira del fuego cuando el sofrito esté poniéndose doradito, aunque si te gusta más caldoso puedes apartarlo un poco antes.
Puedes utilizar este sofrito para acompañar con todo tipo de comidas: arrozes, pescados, pastas, patatas… es un excelente acompañante. También puedes añadirle algún ingrediente como pimientos, ajo, puerros… la dueña de la cocina decide.
Foto Vía: desdenuestracocina
