Hay detalles fundamentales que resultan básicos a la hora de colocar la vajilla, cubiertos, cristalería y mantelería, pues cuando tenemos invitados no deberíamos de hacerlo como el día a día, sino esmerarnos un poco más.
El mantel, por supuesto, debe estar limpio, planchado y preferentemente de color blanco.
El tenedor siempre a la izquierda y la cuchara y el cuchillo a la derecha. Los primeros que se vayan a utilizar se colocan en la parte exterior (siempre en orden inverso al uso).
En la vajilla debemos tener precaución de tener suficientes piezas para todos y no combinar distintos tipos. Los platos hondos siempre van encima de los llanos y nunca solos.
La cristalería, al igual que la vajilla, debe ser toda del mismo tipo y modelo. Debemos poner dos copas, una de agua y otra de vino. La de agua a la izquierda y la de vino a la derecha, siempre frente al plato y en la parte superior.
Al servir la comida, hay que hacerlo por la izquierda y retirarla por la derecha.
El orden de los platos siempre del más suave al más fuerte (entrante, pescado y carne). Si lo que celebramos es una comida deberá ser algo más fuerte que si es cena.
Cuando servimos una bebida nunca hay que apoyar la botella en la copa, ni tampoco levantar ésta.
El plato del pan va a la izquierda de las copas, en la parte superior y encima de los cubiertos del lado izquierdo y si utilizamos saleros, aceiteras, etc. se pone un para cada 6 – 8 personas.
La decoración ya es totalmente personal, pero se recomienda no recargar mucho la mesa, con un centro de flores sencillas es suficiente.
Fuente: boda hoy
Fuente de la noticia: Vestir la mesa en tu boda
