Dejar de fumar, ponerse en forma o aprender un idioma, suelen ser propósitos habituales cuando se inicia un nuevo año. Pero además de estos, cuidar de la salud debería estar presentes. En el caso de las mujeres, es muy importante que se conciencien de la importancia de hacerse ciertas revisiones para evitar males mayores.
Acudir al ginecólogo debería ser algo habitual en sus vidas, aunque esas visitas dependerán de la edad, el historial sexual o la clínica de la paciente. Lo que sí es importante, que a parte de los 13 o 14 años se lleven a cabo revisiones periódicas. Una recomendación llevada a cabo por expertos, como el Dr. Palacios quien afirma que la pandemia del Covid-19 no debe ser una excusa para no realizar esos controles.
Veamos a continuación algunas de las revisiones recomendadas para el año que está a punto de comenzar.
Revisión ginecológica general
Se trata de la mejor opción para detectar quistes, fibromas o enfermedades de transmisión sexual. En las jóvenes de 13 a 15 años, es recomendable realizarse un examen pélvico para examinar la vulva, los órganos reproductivos internos o realizar la primera citología, además de vacunarse contra el virus del papiloma humano.
Citología
Uno de los chequeos médicos más importantes para la salud de la mujer y debe realizarse según protocolos y características de la paciente. Es un examen rápido que no produce dolor. Consiste en tomar una muestra de las células del cérvix con el objetivo de buscar alteraciones que pudieran derivar en patologías como el cáncer cervicouterino o aquellas causadas por el virus del papiloma humano (VPH). En sus estadios más iniciales, el cáncer de útero no suele presentar síntomas. Es por ello que las citologías vaginales, sobre todo en mujeres sexualmente activas, son tan importantes.
Mamografía
Otro de los chequeos imprescindibles que debes realizarte. Es un procedimiento rápido y seguro y la herramienta más eficaz para detectar patologías como el cáncer de mama y menos posibilidades de necesitar un tratamiento agresivo como cirugía de extirpación o quimioterapia. “A partir de los 40 años de edad, las mujeres deberían hacerse esta prueba con regularidad”, apunta el Dr. Palacios.
Densitometría ósea
Esta prueba determina la densidad mineral de los huesos. Se trata de una prueba que permite conocer el estado de los huesos y el diagnóstico temprano de la osteoporosis para prevenir fracturas que por este motivo pudieran presentarse. La descalcificación de los huesos es una enfermedad caracterizada por una pérdida progresiva de calcio y un descenso de la masa ósea. Está presente con mayor frecuencia en las mujeres postmenopáusicas, por lo que se recomienda empezar a realizarse este examen a partir de los 45 años. Así mismo, es recomendable que se realicen esta prueba, las mujeres con menopausia temprana, que tengan antecedentes familiares o que hayan utilizado prolongadamente corticoides.
